Las buenas huellas

¿Caminas? Soy de ese pequeño grupo que le gusta mucho caminar (y trotar) y sí, sé que no pareciera porque suelo trasladarme en auto de un lugar a otro, pero disfruto muchísimo de las caminatas y aunque no lo hago tan a menudo, siempre voy pisando de una u otra manera, al igual que tú. A veces con fuerza, a veces con sutileza, también con cuidado o sin pensar y no necesariamente se hace de forma literal, pero todos los días vamos dejando una impresión en el camino propio y de otros ¿lo habías notado?

Anoche nos fuimos de matri con Titito, como le digo yo y este capitulo de mi vida podría llamarse: "De viejos amores a buenos amigos". Salir de fiesta con tu ex en esta época es inusual y sabíamos que al resto le causaría curiosidad, extrañeza, caería uno que otro prejuicio y ante eso nada podíamos hacer porque no tiene que ver con nosotros, ni con nuestra decisión de escogernos como amigos sino más bien de cómo otros abordan un quiebre y lo que sigue después.

Cuando se cierran algunas historias de amor o de amistad suele ser por "poco entendimiento" o tal vez escasa reciprocidad y creo que eso se reduce únicamente a sintonías diferentes. Jamás podremos coincidir con alguien que no esté en la misma frecuencia que nosotros, es un hecho, pero ¿tenemos que terminar todo desde el resentimiento y odio? Y no quiero que se malinterprete, normalmente cuando no nos entendemos con alguien, la emocionalidad tiene un rol importante, nos lleva a tener posturas más rígidas, a caer en discusiones y de seguro no existe un rompimiento derechamente "dichoso", pero aquí una persona que ha vivido varias separaciones de distinto tipo y etapas, puedo decir que he aprendido a despedirme desde la armonía. Y ojo, no tiene que ver con que no afecte, pero decidir cómo irse de un lugar tendrá un impacto en el nuevo comienzo. Hacerlo de una manera más amigable también ayuda a que los siguientes pasos sean más ligeros y les juro que contribuyo a mi bienestar cada vez que desarmo esa mochila de rencor y solo guardo lo mejor de cualquier experiencia.

Para mí las relaciones humanas son un aprendizaje puro, hermoso y a la vez espeluznante, no son fáciles, eso también es una realidad, pero verlas como nutrientes del desarrollo personal puede convertirlas en verdaderas emperatrices porque los vínculos realmente son supremos, nos entregan abundante crecimiento y son una tremenda oportunidad de expansión.

Finalmente creo que he aprendido a enfocarme en las buenas huellas que dejan las personas en mi vida, que sin importar el desenlace, ese registro especial es capaz de transformar historias, de transformarme a mí y quizás los finales felices sí existen, pero no como nos contaron que eran y que fortuna más grande la de elegir cómo, cuándo, dónde y -quién- (con quién estar o quien quieres ser también).

A mí "el Tito" me ayudó a crecer de una manera increíble y realmente siento demasiada gratitud por su paso en mi vida, me da gusto tenerlo de vuelta y aunque las cosas no son como antes, la vida nos sorprende para hacerla más valiosa todavía y como dije hoy, somos afortunados de seguir teniéndonos! somos buenas personas y nos hacemos bien, al final de día eso es lo único que cuenta, qué tan bien te sientes.

Espero que tu camino esté lleno de buenas huellas, las que dejas y las que llegan, son bonitas, cierto?

Un choque de puños🤜🏻🤛🏻

Camila✨